Descubre los símbolos de Edimburgo y su significado en cada rincón

Edimburgo no solo se conoce por su castillo, sus festivales o su ambiente medieval. También está llena de emblemas y figuras que cuentan historias escondidas. Desde unicornios tallados en piedra hasta un corazón en el suelo que guarda siglos de tradición. 

En este artículo recorreremos algunos de los símbolos de Edimburgo más importantes, su historia y dónde encontrarlos durante tu visita.

Símbolos de Edimburgo en la heráldica: el unicornio y el león rojo

• El unicornio, orgullo de Escocia

El unicornio es uno de los símbolos más llamativos de Escocia y está muy presente en Edimburgo. Desde el siglo XV, este animal mitológico representa pureza, poder y libertad. Los escoceses lo adoptaron como emblema nacional porque creían que solo un unicornio podía resistir la fuerza de un león, animal que representaba a Inglaterra.

En Edimburgo, lo verás coronando la entrada del Palacio de Holyroodhouse, en esculturas de la Royal Mile o en el interior del Castillo de Edimburgo. Cada vez que aparece, recuerda la resistencia de Escocia frente a sus vecinos y la importancia de la independencia.

• El león rojo, símbolo de realeza

El león rampante rojo, conocido como Royal Banner of Scotland, es otro de los grandes símbolos. Su origen está ligado a la monarquía escocesa y aparece en el escudo de armas del país. Este león, erguido y con garras afiladas, representa valor y soberanía.

En Edimburgo, puedes encontrarlo ondeando en banderas, en vitrales de la Catedral de St. Giles y en detalles de edificios oficiales. Aunque hoy en día no es la bandera nacional (esa es la Saltire, con la cruz de San Andrés), el león rojo sigue siendo uno de los emblemas más respetados.

Símbolos de Edimburgo en las calles: el Heart of Midlothian

Uno de los símbolos más curiosos de la ciudad es el Heart of Midlothian, un mosaico en forma de corazón incrustado en el suelo, justo frente a la catedral de St. Giles, en la Royal Mile.

El corazón marca el lugar donde estuvo la prisión de Tolbooth, demolida en el siglo XIX. Los habitantes de Edimburgo tenían tan mal recuerdo de aquel sitio que comenzaron a escupir sobre el corazón como muestra de desprecio hacia la antigua autoridad. Con el tiempo, este gesto se convirtió en tradición.

Hoy, turistas y locales siguen escupiendo sobre el mosaico. Para unos, es una forma de participar en la historia; para otros, un ritual de buena suerte. Sea cual sea el motivo, el Heart of Midlothian sigue siendo un símbolo de resistencia ciudadana.

Símbolos de Edimburgo en sus edificios: gárgolas y quimeras

Las gárgolas y quimeras son parte del paisaje arquitectónico de Edimburgo. Talladas en piedra, con formas de animales fantásticos, dragones o figuras grotescas, cumplen dos funciones: la práctica y la simbólica.

Por un lado, las gárgolas servían como desagües, evacuando el agua de lluvia de los edificios medievales. Por otro lado, se creía que ahuyentaban a los malos espíritus y protegían los templos.

Un buen lugar para observarlas es la Catedral de St. Giles, donde las quimeras parecen vigilar la ciudad desde lo alto. También en la Universidad de Edimburgo y en otros edificios históricos verás estas esculturas que, más allá de su estética, reflejan el imaginario medieval cargado de supersticiones y misticismo.

Símbolos de Edimburgo en la naturaleza: el cardo

El cardo es la flor nacional de Escocia y uno de los símbolos más repetidos en Edimburgo. Según la leyenda, en plena Edad Media un grupo de invasores intentó sorprender a los escoceses de noche. Pero uno de ellos pisó un cardo y su grito de dolor alertó a los defensores, que lograron salvarse.

Desde entonces, el cardo representa protección, resistencia y la capacidad de sobreponerse a la adversidad. Lo verás en monedas, insignias, en la fachada de edificios históricos y hasta en souvenirs modernos. En Edimburgo, está presente en los detalles del Castillo y en instituciones oficiales.

Vivir los símbolos de Edimburgo en el Castillo

Todos estos símbolos encuentran un punto de encuentro en el Castillo de Edimburgo, la atracción más visitada de Escocia. Este enclave ha sido testigo de la historia de la ciudad y guarda algunos de sus emblemas más valiosos: desde las Joyas de la Corona, adornadas con leones y cardos, hasta cañones como el Mons Meg, que representan la fuerza defensiva de la nación.

Unirse a un recorrido como el tour en español al Castillo de Edimburgo es una forma ideal de comprender cómo estos símbolos han marcado la identidad del país. Con la ayuda de un guía, las piedras hablan, las leyendas cobran vida y cada detalle heráldico se entiende en su contexto.

Conclusión: interpretar los símbolos de Edimburgo

Edimburgo no se limita a sus paisajes ni a sus calles medievales. Es una ciudad donde cada emblema tiene una historia que contar.

Descubrir estos símbolos de Edimburgo es abrir una puerta a su pasado y a su identidad. Porque más allá de la visita turística, interpretar cada figura y cada detalle es conectar con la esencia de Escocia.

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